Así sí se deben hacer las cosas: bien, Microsoft y AWS; mal, Google

Reflexiones sobre las nuevas regiones de nube pública anunciadas

Así sí se deben hacer las cosas: bien, Microsoft y AWS; mal, Google
Photo by Taylor Vick / Unsplash

Dos modelos diferentes

Hace unos meses publiqué la Comparativa latencias Cloud: GCP vs. AWS — para todo el territorio nacional. Ambas empresas, Google Cloud y Amazon Web Services, han abierto regiones en España, aunque con modelos diferentes:

  • Google ha aprovechado la infraestructura que Telefónica ya tenía en Madrid.
  • Amazon Web Services (AWS) ha construido su propia región en Aragón.
  • Microsoft Azure está construyendo sus centros de datos en Aragón, también.

¡Felicidades, Aragón!

Dos de los tres grandes proveedores de nube pública (¿quién inventó este término? En mi opinión, lleva a confusión. PD.: FSFE) han elegido Aragón para crear sus nuevas regiones. No creo que sea coincidencia ni azar, así que muchas felicidades a aragoneses y aragonesas; así como al equipo del sector público que ha facilitado estas actuaciones.

Google: puede mejorar

De las 3 empresas, Google es la única que no tiene centros de datos propios. Aunque a Telefónica esto le suponga ingresos recurrentes (bien), considero que el enfoque no es el correcto.

Sí, se han de construir centros de datos. Es parte de la inversión que se han de hacer y denota un espíritu de permanencia en la región. Y, también, no hace falta que sea en Madrid: hay España más allá de la capital.

Impacto: bien, pero…

El impacto en la economía es claro:

  • 2.500 millones y 1.300 empleos dice AWS, así como un incremento del 1.800 M€ al PIB nacional, a lo largo de 10 años.
  • La nueva infraestructura que Microsoft planea en España podría sumar 8.400 millones de euros al PIB nacional y contribuir a la creación de 69.000 puestos de trabajo indirectos en el periodo 2026 – 2030, según un análisis de IDC. (Blog Microsoft)
  • Google Cloud: El proyecto generará 10.000 empleos y tendrá un impacto en la economía del país de 1.300 millones de euros. (vía El País)

Pero no es oro todo lo que reluce… También se han de tener en cuenta, por ejemplo, el impacto medioambiental. El consumo de los centros de datos de AWS (sí, solo teniendo en cuenta este proveedor) será el equivalente a 850.000 hogares españoles, según datos de la propia empresa.

850.000 hogares son muchos hogares. A una media de 2,5 personas/hogar, es la electricidad de más de 2 millones de personas (2.125.000, concretamente). Si esto se extrapola a 3 grandes proveedores, manteniendo estos datos: ¿es ético que consuman como 6,375 millones de personas (el 13,15 % de la población de nuestro país)? Esta respuesta la ha de responder el lector.

Sí, es cierto que las propias empresas han invertido en grandes proyectos renovables, y en todas se escuchan las palabras carbon neutral (o negative), pero el consumo y las emisiones de estas plataformas son muy reales.

También tenemos que tener en cuenta que estas empresas no pagan todos los impuestos que deberían en España (por los beneficios que les genera su actividad en nuestro país). 30.000 millones en 2020, según este artículo de elEconomista.es. Solo en un año ya han dejado de pagar, toda su inversión en los próximos 10… No es muy justo, ¿no?

Y, en especial Amazon, por su negocio de venta en línea, también creo importante resaltar las políticas de recursos humanos. De nada sirve que los trabajadores y trabajadoras de la sección más tecnológica ganen muchísimo, si los empleados y empleadas de logística están sometidos a una elevada presión y temor y una exigencia física considerable.

En conclusión

Por concluir, considero muy beneficioso para el tejido empresarial estas aperturas de regiones de los grandes proveedores de nube pública; pero se pueden hacer las cosas todavía muchísimo mejor: más reparto de los beneficios, trabajadores con más derechos, menos Madrid (y más España), y mucho más pensamiento ecológico.